¡Acompáñanos a viajar por el mundo de los libros!
Añadir este libro a la estantería
Grey
Escribe un nuevo comentario Default profile 50px
Grey
Suscríbete para leer el libro completo o lee las primeras páginas gratis.
All characters reduced
Selección de relatos de horror de Edgar Allan Poe - cover

Selección de relatos de horror de Edgar Allan Poe

Edgar Allan Poe

Editorial: Plutón Ediciones

  • 3
  • 21
  • 0

Sinopsis

Rey del suspense, rey de los relatos más o menos breves, eximio poeta, rey de los cuentos de terror, rey de la fantasía y de las desgracias personales, maestro de muchos escritores posteriores como Baudelaire, Dostoievski, Kafka, Lovecraft y Stephen King. Todos estos adjetivos y más le cuadran con exactitud al norteamericano Edgar Allan Poe (1809-1849). Su vida, relativamente corta, la proyectó en sus escritos como nadie, actuando de catarsis, no lo suficiente para que finalmente se malograra. He aquí una muestra más de su prolífica imaginación.
Disponible desde: 07/02/2017.

Otros libros que te pueden interesar

  • El gran día de la señorita Pettigrew - cover

    El gran día de la señorita...

    Winifred Watson

    • 1
    • 2
    • 0
    La señorita Pettigrew, hija de un párroco, lleva toda la vida de casa en casa, ejerciendo de institutriz de niños «espantosos». A sus cuarenta años, «tímida y derrotada», no tiene un penique ni un vestido decente, está en paro y a punto de ser desahuciada. Una agencia de empleo le da la que podría ser su última oportunidad, pero cuando se presenta en el lujoso piso de la señora que la contrata, se encuentra, no con una madre de familia, sino con una joven belleza, rubia platino, envuelta en un salto de cama espectacular. Y lo primero que le pide, apuradísima, es que la ayude a deshacerse de un amante porque espera la inminente llegada de otro. Empieza así un largo día en el que, hora tras hora, la institutriz no gana para sobresaltos: su nueva patrona, la señorita Delysia LaFosse, no parece tener hijos, es cantante de un club nocturno, no solo tiene dos amantes sino tres y la introduce en un mundo inédito de fiestas, glamour y aventuras. Para su propia sorpresa, esta «solterona madura con ideales románticos» se ve abjurando de sus principios mojigatos y abrazando con entusiasmo una vida sin «moralidad», escandalosa y hasta violenta, donde paradójicamente se la trata bien por primera vez. Con una sabiduría aprendida en el cine y las novelas populares, llega incluso a resolver entuertos de lo más peliagudos. El gran día de la señorita Pettigrew (1938) de Winifred Watson es un clásico de la comedia británica, un cuento de hadas de otros tiempos donde la heroína es a la vez Cenicienta y el hada madrina.
    Ver libro
  • Historias de amor - cover

    Historias de amor

    Robert Walser

    • 4
    • 23
    • 0
    De los más de mil relatos cortos escritos por Robert Walser unos cien versan sobre el amor. Volker Michels, germanista y autor del epílogo que acompaña esta edición, seleccionó en 1978 ochenta y los ordenó cronológicamente. Estos relatos demuestran la gran variedad del registro expresivo de Robert Walser y dan fe de la evolución de un autor que tenía un concepto poco convencional del amor y del erotismo. En ellos se manifiesta un desmesurado amor mundi que lo envuelve todo, las muchachas y los pájaros, las nubes y las mujeres distantes, las flores en los prados y los enamorados que se tumban sobre ellos con su mirada benévola pero también pícara. Con graciosas caricias poéticas, abundantes diminutivos y giros verbales absolutamente delirantes, Robert Walser recoge todo lo que le viene a las mientes para conformar un mundo palpitante de comunicación amorosa y de placer. Son éstas, en suma, unas historias plenas de un humor corrosivo contra la hipócrita moral burguesa, en las que también aparecen irónicas imitaciones de la literatura amorosa y recreaciones burlescas de los sueños de la adolescencia.
    Ver libro
  • Una dama extraviada - cover

    Una dama extraviada

    Willa Cather

    • 2
    • 5
    • 0
    Una dama extraviada apareció en 1923 y, dos años después, su autora recibió una carta de Francis Scott Fitzgerald, que acababa de publicar El gran Gatsby y estaba preocupado por ciertas similitudes entre ambas novelas que podían alimentar la sospecha de «un caso de plagio». Willa Cather le respondió que no veía motivos para sentirse plagiada, y Scott Fitzgerald respiró aliviado; aunque lo cierto es que Una dama extraviada era la obra que tenía en la cabeza mientras escribía su novela, y la causa directa de ciertos cambios en el proceso de su composición. Pero ¿qué podía tener que ver el mundo del glamour y el dinero que pintaba Scott Fitzgerald con el Oeste heroico, aun en sus últimos reflejos, de Willa Cather? Quizá esta historia de fascinación sostenida y sueños traicionados, vista por un joven que se abre a la vida, nos dé la respuesta. Marianne Forrester, esposa de un pionero del ferrocarril, anfitriona de la única casa elegante de la triste población de Sweet Water, siempre alegre en la riqueza y siempre resistente en la penuria, pasa de ser una gran señora a una mujer señalada por todas las habladurías. Un joven que la adora acaba despreciándola, y sobre su relación construye la autora un espléndido ejercicio sobre los entresijos de toda idealización.
    Ver libro
  • La obligación - cover

    La obligación

    Stefan Zweig

    • 1
    • 5
    • 0
    Ferdinand vive con su mujer en una Suiza llena de paisajes hermosos. Él es pintor y está dedicado a penetrar en los secretos de la belleza que hay en lo natural. Sin embargo, al recibir una carta de reclutamiento para pelear en la Primera Guerra Mundial, descubre que él no es solo él, sino todos los hombres unidos o una sociedad en marcha. Ferdinand tiene el deber de pelear por su país, de liberar Europa, pero se debe también al arte, a la profundidad de la existencia, al amor y su familia. ¿Hay una obligación más fuerte que la otra?
    
    Publicada en 1920, esta novela corta de Stefan Zweig, uno de los autores europeos más importantes del siglo XX, toca conflictos presentes en la vida del autor, cruzada por ambas Guerras Mundiales. Si bien para la Primera fue abiertamente pacifista, para la Segunda fue acusado de no atreverse a escribir sobre la guerra y el nazismo, dilema que aquí, años antes, ya enfrentaba.
    Ver libro
  • El puente de Alexander - cover

    El puente de Alexander

    Willa Cather

    • 6
    • 8
    • 0
    Bartley Alexander anda ya por la mediana edad y es un ingeniero de éxito, un hombre hecho a sí mismo, admirado por los puentes que construye. Casado con una mujer culta y rica, vive en una bonita casa en Boston y parece también tener una feliz vida conyugal. Pero en un viaje a Londres vuelve a encontrarse con un antiguo amor, Hilda Burgoyne, a la que conoció en París cuando era estudiante –entonces «fue la juventud, la pobreza y la cercanía, todo era joven y amable»− y que ahora es una actriz famosa. El reencuentro reaviva «la energía de la juventud que debe reparar en sí misma y pronunciar su nombre antes de desaparecer». A los dos las cosas les han ido bien; sin embargo, quizá no hayan agotado sus posibilidades. 
    El puente de Alexander (1912) recrea la intensa sensación, cuando a uno le amenaza ya «la desganada fatiga», de verse acompañado por «su propio ser juvenil», que posiblemente acabe siendo «el más peligroso de los acompañantes». Willa Cather no guardaba –como se ve en dos textos que figuran como apéndice a este volumen− muy buen recuerdo de esta su primera novela: le parecía demasiado deudora de los autores que admiraba, Edith Wharton y Henry James. Pero lo cierto es que hay en ella, en su estudio de una doble vida, toda la excitación y la fatalidad y todo el talento para la introspección que caracterizarán su obra posterior.
    Ver libro
  • Canto yo y la montaña baila - cover

    Canto yo y la montaña baila

    Irene Solà Saez

    • 5
    • 33
    • 1
    Primero llegan la tormenta y el rayo y la muerte de Domènec, el campesino poeta. Luego, Dolceta, que no puede parar de reír mientras cuenta las historias de las cuatro mujeres a las que colgaron por brujas. Sió, que tiene que criar sola a Mia e Hilari ahí arriba en Matavaques. Y las trompetas de los muertos, que, con su sombrero negro y apetitoso, anuncian la inmutabilidad del ciclo de la vida. 
    Canto yo y la montaña baila es una novela en la que toman la palabra mujeres y hombres, fantasmas y mujeres de agua, nubes y setas, perros y corzos que habitan entre Camprodon y Prats de Molló, en los Pirineos. Una zona de alta montaña y de frontera que, más allá de la leyenda, conserva la memoria de siglos de lucha por la supervivencia, de persecuciones guiadas por la ignorancia y el fanatismo, de guerras fratricidas, pero que encarna también una belleza a la que no le hacen falta muchos adjetivos. Un terreno fértil para liberar la imaginación y el pensamiento, las ganas de hablar y de contar historias. Un lugar, quizás, para empezar de nuevo y encontrar cierta redención.
    Ver libro